No soy un corredor de élite como el Michel, y obviamente no puedo ni tampoco me vendría de gusto corretear en el abrasado julio en medio de del desierto ni en ninguna parte, y mis mínimas correrías se limitan a 4km por la arena de la playa. Pero la próxima hazaña hercúlea del Michel me invita no obstante a emularle virtualmente y nada mejor para eso que atrapar un libro de mi hijo, de Darío Vidal Llisterri "A mitad de camino,Los Monegros" 1971 con dibujos de Grau Santos . Desde el primer momento el libro cautiva, y la exposición detallada de personajes invita a anotarlos así como ir al google maps y recorrer esos itinerarios vacíos de asentamientos y sobrados de espacio.Conste que no le encuentro la magia a los desiertos remotos, pero estos paramos grises me resultan más próximos y por tanto más apetecibles.
Leí hace poco "Nuevo viaje a la Alcarria", pero el texto no me dijo nada y me pasó sin pena ni gloria y cautiva más a los autores caminantes que no al Cela conducido por la choferesa negra del Rolls.
He reparado en dos personajes en los que por su temprana edad, al cabo de 40 años es probable que ronden por acá y que estén referenciados virtualmente. Primero dí con una de las hijas de los esquiladores de Farlete ya que al mencionar el autor los apellidos de los padres salen los de los hijos, y de ahí sale una JULIA ESCUER PES de 9 años que está en facebook y a la que remití mensaje del que espero alguna noticia.
Luego he indagado en una adolescente y voraz lectora, 2ª hija de los posaderos deA Peñalba: ESTER FRAUCA CACHO. Esta parece hacer honor a su afición literaria que de alguna forma perpetua, y la encuentro como redactora y colaboradora de la revista Zimbeler de Castillazuelo, y al @ de la revista he mandado unas notas para contactar con ella.
Por supuesto he indagado en el autor y en su blog he vertido un comentario sobre todo esto.
Otras veces he indagado el rastro de los vestigios hallados en un libro , pero esta vez se trata de personajes del mismo, no de vestigios de sus dueños o lectores. Por otro lado no creo que el autor diese cuenta a esas dos niñas y demás personajes retratados, de ser objeto de algún comentario, luego puede ser una grata sorpresa para las dos mencionadas.
