
Mi único amigo de la infancia que conservo en activo Vicente Mira... gusta de las dos o tres veces que al año nos vemos, pasarme alguna lectura y yo muerdo siempre gozoso esos envites. Estas navidades pasadas me dejó esa biografía de Jung, él no había reparado en el capítulo del torreón, y yo nada más hojear el libro cuando me lo pasó, ya reparé en esas páginas de las que me he atrevido a traer algunas, sin más añadidura que el subrayado .
Sí, verdaderamente hay coincidencias universales que te reconfortan espiritualmente con la Humanidad, y más cuando cronologicamente son anteriores a uno mismo.



5 de diciembre de 2016
Han pasado casi cinco años y he recordado esta entrada a propósito de que ayer domingo cuando estaba en el mismo Torreón usando a modo de palimpsesto el libro "Regalos de la vida" de Emil Ludwig inserté en el volumen comentarios que si no tuviera pudor debieran figurar en esta entrada, y que de momento se quedan en el libro , cuyo título lo dice todo, al menos respecto a lo que comentaba. En todo caso hoy sólo me atrevo a decir , que el cartelito minúsculo que cuelga del techo ha quedado muy en entredicho , no podía ser menos : "soy feliz aquí, no me trato con nadie".