Estaba pensando sobre la postura más adecuada de lectura, adecuada en el sentido de que armonice o conjuge entre la eficacia y rendimiento y la comodidad. Dejando a un lado posiciones de aprovechamiento como la de ir de pie y andando, que no entiendo, y la no desaprovechable del transporte público. Creo que las tres posturas podrían resumirse en :
1.- Tumbado. Acostado o no.
2.- Sentado o arrellanado en butaca o sillón.
3.- Sentado y apoyado en mesa.
La alternancia a la apetencia del momento creo que es lo más satisfactorio. Así este fin de semana me ha dado por leer ante todo sentado a mesa puesta en medio del jardín. En caso de libros pesados, no tener que sostener el libro ya es una comodidad y por eso me gusta tan poco leer acostado, aparte de que me quedo dormido y acaba siendo siempre lectura introductoria al sueño.
En todo caso hay algo creo fuera de duda, de que la lectura más productiva en cuanto a inmersión y avance es la solitaria, solitaria de gentes y no digamos de ruidos. Y es por eso por lo que no tengo capacidad de leer con música.
Por cierto la lectura devorada este fin de semana fue un estupendo ensayo antropológico de Jean Larteguy: "Tahití,la piragüa y la bomba".
ResponderEliminarYo solía leer en la cama, aguantaba horas y horas, y durante muchos años ese fue el momento más feliz del día, con el silencio y la calma, el recogimiento de la noche y el aislamiento del sueño de los demás. Ahora se me fatigan mucho los ojos por la noche, y leo por la mañana, en la mesa de la cocina, y es cierto que es muy comodo tener el libro apoyado en la mesa.
ResponderEliminarDurante mi infancia y adolescencia viví en una casa llena de gente y de ruido, y además, al compartir dormitorio con mi hermano mi madre no me permitía leer en la cama, así que me acostumbré a leer en ambientes bulliciosos, me abstraigo totalmente, aunque eso no me sirve para estudiar.
La música me distrae también de la lectura, será porque me gusta mucho.
Ana-I.