jueves, 18 de abril de 2013

EVOLUCIÓN-INVOLUCIÓN


Creo que era en el programa de Cuarto Milenio en que el otro día debatían sobre la involución del hombre. Como es habitual en estos casos se hablaba sólo de los aspectos intelectuales y no puramente físicos. La voz más crítica con la evolución y defensora de la involución era la de F.Sánchez Dragó, que atribuía la misma a las nuevas tecnologías, especialmente a INTERNET. Evidentemente no puedo estar de acuerdo que per se el uso de Internet mengue las capacidades, naturalmente que las capacidades pueden variar o atrofiarse, pero se generan otras. No puede afirmarse que anula la memoria, cuando es la red que proporcionando la información total provoca que haya necesidad de retener más datos obligando al intelecto a ordenarlos. ¿Quién puede definir las habilidades que forman el coeficiente intelectual?. Cuando un contertulio decía que su capacidad de lectura de libros y absorción del conocimiento es ahora menor, sólo es achacable a él. El sabrá si lo que le pasa es que teniendo Internet ya no le apetece tanto la lectura tradicional o le da pereza acometer obras de mucho volumen.

Otra aseveración que se hizo de que un ciudadano culto del mundo clásico antiguo es más inteligente que uno de hoy hay que cuestionarlo del todo, pues hay que acudir a medias de población, y por supuesto la de ahora sería superior a la de hace 2000 años.
Más sugestivo y espinoso por antropológicamente heterodoxo me pareció un comentario, que se dijo inocentemente, pero desarrollado acaba en eugenésico o puede ser arma ideologica criminal: dijo alguien de la mesa que por selección natural siglos ha solo habían podído prosperar o salir adelante los más listos o fuertes. La mesa no desarrolló el comentario pero no es díficil llegar a la peligrosa tesis de que la caridad o solidaridad hace que las sociedades avanzadas no dejen de lado a los menos voluntariosos y dotados fisica e intelectualmente, los cuales no solo son ayudados a vivir sino que perpetuan sus escasas dotes produciendo descendencia a lo y a la que por supuesto también se les ayuda.La mesa no se estaba dando cuenta de que sus lamentos de involución podían traer más causa de haber desterrado la ley de la selva que de la absurda crítica a las nuevas tecnologías .

Pero sin nos ceñimos solo a las dotes físicas de fuerza y destrezas, y de salud por descontado, el maquinismo no aboca necesariamente a la atrofia, creo que nunca se vió tanta práctica deportiva y no sólo como fin en sí mismo de ejercicio físico, sino como medio ecológico de actividad cotidiana a realizar: durante años siempre me sorprendió la inexistencia radical de la bicicleta como medio de transporte, nunca ví una bicicleta en la Universidad cuando era joven, y llamaba la atención por pena o excentricidad cuando yo ya utilizaba la bici como medio y no como fin. Aún recuerdo aquella noche del 23-F de 1981 huyendo en bicicleta antes de que diese el toque de queda, y aquel mismo verano de 1981 al pasar por delante de una discoteca en que una garrula que me vió me espetó que no tenía para una moto.En 1975 si a uno le preguntaban por el transporte urbano del futuro para 2013 a lo mejor dijo que en platillos volantes. Yo no me marcaré el farol de haber previsto que sería la bicicleta, pero a buen seguro que es lo que yo deseaba. Prescindir de maquinismos no sólo es cuestión de querer ejercitar el cuerpo, es utilizar tus propias energías, ahorrar otras y tener la grata sensación de hacer las cosas de la forma más autosuficiente posible,por eso yo ya he desterrado la aspiradora, la lavadora y el cortasetos eléctrico, aunque en cambio dependo felizmente del microondas.Pero no sólo es una cuestión de ser capaz de ser algo autosuficiente; es también una forma remota e intangible de solidaridad con esa ingente masa de la especie que sobrevive miserablemente con el esfuerzo físico, desgastador y tan insalubre que en el primer mundo sería un trabajo ilícito.
¿Y el deseo sexual? http://sofion.blogspot.com.es/2013/04/fue-siempre-lo-mismo.html

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Gracias por merecerte interés dejarte caer por aquí y dejar una huella